Rival by Penelope Douglas

autor:Penelope Douglas
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Romántico
publicado: 2018-05-03T22:00:00+00:00

Capitulo 20

Madoc

Estuve a punto de abandonar todo el plan en el minuto en que la abracé, en el segundo en que toqué sus labios, en el instante en que jadeó mi nombre.

Pero no pensaba ni por asomo volver a verla marchar. Esta vez no. Ahora sería yo quien se fuera.

Alcé la comisura del labio mientras caminaba entre la multitud. Estaba rígida como un cubito de hielo cuando la aparté de Aidan, y luego se derritió como agua entre mis brazos. Ahora era un charco en mitad de la pista de baile.

«Yo soy el hombre».

¿Qué más daba que estuviera tan sexi sobre el escenario? ¿O que hubiera sentido celos cuando Aidan se había puesto a bailar con ella? ¿O que estuviera dispuesto a matarlo cuando le vi la mano dentro de la camiseta de ella?

«Que le dieran a él y que le dieran a ella».

―¡Que te den! ―me gritó Ashtyn cuando volví a la mesa. Vi que echaba la mano hacia atrás y me aparté justo en el momento en que habría colisionado contra mi mejilla.

―¿En serio? ―Alcé las manos, riendo―. Tranquila, solo ha sido una broma.

Me imaginé que había visto el beso.

―¡Eres un capullo! ―gritó y se largó.

La gente que me rodeaba empezó a reír, también Jax. Jared negaba con la cabeza y Tate tenía el ceño fruncido.

―Venga ya ―señalé con tono sarcástico―. Me habéis echado de menos y lo sabéis.

Tate puso los ojos en blanco, se levantó y se alisó la camiseta.

―Eso pensaba. ―Miró a su alrededor y suspiró―. Portaos bien, chicos, yo voy a sacar a Fallon del baño.

No sabía cómo la había visto Tate marcharse a la parte trasera del bar entre tanta gente, pero no tardó nada en desaparecer, abriéndose paso entre las personas que bailaban, en busca de su amiga. Tomé asiento, apuré lo que me quedaba de cerveza y me vencí hacia delante cuando Jax me dio una palmada en la espalda.

―¿No vas a ir detrás de ninguna de las dos? ―me preguntó. Entrelazó los dedos en la nuca y se apoyó en las patas traseras de la silla.

―¿De Tate y Fallon? ―Lo miré―. Me parece que pueden cuidarse solas.

―No, me refiero a Fallon y a Ashtyn. ¿Ashtyn no es tu novia?

«Novia». La palabra me daba ganas de enterrar la cabeza en el barro y no sacarla para respirar hasta que estuviera muerto.

―No. ―Volví a mirar la pista de baile―. ¿Cuándo he tenido yo novias?

Miré a Jared al otro lado de la mesa, pero no dijo nada. No obstante, habló lo suficiente con la mirada.

Él sabía que pasaba algo y que yo estaba mal. Pero, como buen amigo que era, no sintió la necesidad de decir lo que era obvio.

Tan solo saber que estaba aquí y que lo entendía me bastaba.

Vi la camiseta roja de Tate acercándose entre la gente y me erguí cuando me di cuenta de que estaba sola.

―Bueno. ―Suspiró y se llevó las manos a las caderas―. Supongo que podemos irnos ya. Me he cansado de noche.

Sonrió a Jared y compartieron una mirada que significaba que ellos no estaban cansados.

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