La lucha by Jennifer L. Armentrout

La lucha by Jennifer L. Armentrout

autor:Jennifer L. Armentrout [Armentrout, Jennifer L.]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Fantástico
editor: ePubLibre
publicado: 2017-02-28T16:00:00+00:00


19

Josie

Los latidos de mi corazón se ralentizaron y después se aceleraron. Pensaba que Seth solo me lo había dicho una vez, cuando creía que estaba dormida, y a veces ni siquiera estaba cien por cien segura de que le hubiese oído confesarlo.

Pero ahora sí que lo había dicho.

Exclamó aquellas dos cortas palabras que lo significaban todo.

Bueno, «tengo tarta» también eran dos palabras poderosas y breves, pero escuchar a Seth decir que me quería era como mil esperanzas y sueños hechos realidad a la vez.

Una parte de mí quería salir de debajo de las sábanas y lanzarme a sus brazos. La otra se encontraba paralizada debido a la confusión e inquietud. No entendía del todo qué estaba pasando. Quizá porque estaba tan cansada que después de haberme despertado y comido, me sentía completamente agotada. Pero parecía que solo hubiesen pasado escasas horas desde que estuviese en aquel suelo sucio, aguardando… y deseando morirme en lugar de pasar otro segundo con Hiperión o el resto de los Titanes. Aún seguía sin entender cómo había llegado aquí o cómo ayudaríamos a Mitchell si Seth se negaba a dejarme buscarlo o a separarse de mí.

Y quería celebrar sus palabras. Por fin admitía lo que sentía por mí, pero era incapaz de borrar la imagen de él y aquella preciosa morena.

—¿Josie? —Su mirada encontró la mía y reparé en que no había dicho nada.

Tomé aire.

—Llevo… llevo esperando muchísimo para que me dijeras eso.

Sus labios empezaron a curvarse en una sonrisa.

—Debería habértelo dicho hace muchísimo.

Quería devolverle la sonrisa, pero lo único que conseguí fue mantener el contacto visual. Había muchísimas cosas de las que teníamos que hablar y en las que tenía que centrarme. Y estaba desnuda. Es decir, no llevaba nada puesto bajo la bata, que era demasiado grande y no dejaba de deslizárseme por el hombro y de abrirse por delante. Recordaba vagamente a Seth sacándome de la ducha mientras sollozaba y cómo me cubrió con la bata cuando salí de la cama y caí desnuda en el suelo.

Aquellos ojos ámbar se llenaron de preocupación.

—Josie, di algo, por favor. Cualquier cosa.

Tenía que decir algo.

—Si me quieres, ¿por qué… por qué te he visto fuera con ella?

Seth se quedó quieto durante un momento y después bajó las manos hasta el espacio entre nosotros.

—Creo que he de empezar por el principio.

—Sí. —Remetí la manta bajo mis brazos—. Creo que eso tendría sentido.

Seth se levantó de la cama y se dirigió a un armario. A pesar de todo lo que teníamos que hablar y de todo lo que me había sucedido, no pude evitar que mis ojos vagaran por toda su piel expuesta. Antes había estado sin camiseta, pero no me había dado cuenta. Ahora sí. Tenía los pectorales definidos. Los abdominales perfectamente marcados. Los pantalones de chándal lo suficientemente bajos como para mostrar esas hendiduras a cada lado de sus caderas. Incluso su espalda era magnífica. Larga, esbelta y musculosa.

¿Por qué no podía llevar una camiseta puesta?

Pero se trataba de Seth, así que por supuesto que no.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.