El pañuelo negro by Rafael Sarmiento

autor:Rafael Sarmiento
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Policial
publicado: 2015-12-31T23:00:00+00:00

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El timbre de la casa sonó y el mayor Kiril Sorokin supo que el coche había llegado.

—Qué eficiente es este Ulianov—. Se dijo a sí mismo en referencia al oficial que venía a recogerle y que se había adelantado en diez minutos a la hora prevista.

Una sonrisa se le escapó. Estaba de buen humor. El día anterior, habían llegado órdenes desde Moscú para que un buen número de militares se movilizara en apoyo a la búsqueda de dos peligrosos delincuentes huidos desde la Unión Soviética. Sorokin no sabía exactamente qué delito habrían cometido, pero muy grave debía ser el asunto para que la respuesta fuera tan contundente. En el fondo, le daba igual. A él le gustaba la acción. Era militar por vocación, mucho más allá de que ello le proporcionara un estatus y, por ende, unos privilegios que estaban vetados al grueso de la población. Y el hecho de estar en su base en Cracovia sin nada más que hacer que llevar a cabo labores de control, maniobras y estar disponible para posibles operativos le aburría.

Solo cuando se montaban estos operativos y le encomendaban misiones, encontraba sentido a su profesión. Era lo que le estimulaba, lo que hacía que siguiera amando a aquello a lo que se dedicaba.

Y eso que la misión que le habían impuesto esta vez tenía toda la pinta de ser de lo más aburrida también. Debía trasladarse con sus hombres al sur, a la región de los Montes Beskides, una importante serranía perteneciente a los Cárpatos y que suponían la frontera entre Polonia y Checoslovaquia. Y esa era la clave. La frontera. Debían reforzar la vigilancia de los pasos fronterizos porque esos dos delincuentes llevaban días huyendo. Partieron desde Moscú y se sabía que habían sido capaces de llegar hasta Polonia y de saltarse el cerco al que habían sido sometidos, pero no conocían exactamente su paradero ni el lugar al que se dirigían. Por eso tenían que intentar dar con ellos a lo largo de todo el país y procurar que no salieran del mismo. Además de la policía, buena parte de las unidades del Ejército Rojo con base en Polonia estaban movilizadas, cada una con distintas misiones, y a la que él dirigía le había tocado vigilar parte de la frontera sur, estableciendo su base provisional en la ciudad de Zakopane, la más importante de la comarca.

Sorokin conocía bien aquella zona y por eso suponía que se iba a tratar de algo sencillo. La conocía porque él y su familia solían ir mucho por allí, ya que era un lugar bastante frecuentado por esquiadores, deporte al que él era muy aficionado. Y, sin duda, le enviaron a él por dicho conocimiento. Se trataba de una zona lejana, apartada y de no muy fácil acceso. No tanto la localidad de Zakopane, que tenía una población considerable para pertenecer a una zona de montaña, pero sí los pasos fronterizos, por donde el tránsito de personas era muy reducido, por no hablar de prácticamente nulo.

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