(El club Bastion 05) Un amor sorprendente by Stephanie Laurens

autor:Stephanie Laurens [Laurens, Stephanie]
La lengua: spa
Format: epub
ISBN: 9788408115014
editor: kms
publicado: 2013-04-03T22:00:00+00:00

13

Por la ventana del carruaje, Phoebe contemplaba las casas que iban dejando atrás. Se veían luces en las que se estaba celebrando alguna fiesta. Había invitados saliendo de otras y en la noche resonaban los cascos de los caballos y las alegres voces de los juerguistas.

Ya era tarde. A unas pocas manzanas, en Mayfair, la buena sociedad estaría preparándose para abandonar los bailes. Reconoció que, por un fugaz momento, le habría gustado estar entre ellos en lugar de encontrarse en una situación que, en el mejor de los casos, podía calificarse de difícil, pero en ese caso la señorita Spry habría estado perdida.

Apretó la mandíbula, organizó sus pensamientos para enfrentarse a la batalla y los dirigió hacia Deverell y hacia cómo debía enfrentarse a él. Era evidente que iba a ser un problema muy real. De hecho, tras presenciar todo lo que había presenciado esa noche, se había convertido en una verdadera amenaza para su empresa.

Sentada en el extremo del asiento de cuero, con el rostro oculto a su vista, era muy consciente de su presencia, de su duro cuerpo al lado, cálido y vivo, de sus férreos músculos y su mente incisiva, de su fuerza, no sólo en lo físico, sino en otros muchos planos también. Sería un adversario formidable.

¿Podría convertirlo en un aliado? O, si no, ¿podría al menos convencerlo de que guardara silencio? No lo sabía. Tendría que avanzar a ciegas.

El carruaje giró por una tranquila calle. Phoebe hizo una mueca para sus adentros. Después de que hubiera usado tan descaradamente la herida de Fergus para hacerla ir a su club, para hacerla entrar dócilmente en la guarida del león, de una cosa estaba segura: él aprovecharía cualquier ventaja que el destino le ofreciera, usaría cualquier poder que tuviera y utilizaría las crecientes deudas de gratitud que Phoebe tenía con él para presionarla para que se lo contara todo, todo lo que deseara saber. Y lo que ella necesitaba saber era cómo evitar eso.

El carruaje aminoró el ritmo y se detuvo. Deverell abrió la puerta y descendió. Se volvió, le ofreció la mano, se la cogió con firmeza y la ayudó a bajar.

Phoebe miró a su alrededor mientras él pedía a su mozo, Grainger, que se adelantara hacia la casa. El chico regresó en menos de un minuto con un sirviente. Un individuo corpulento, vestido con sumo cuidado y con aspecto de ser el mayordomo los seguía.

Mientras Grainger y el sirviente ayudaban a bajar a Fergus del carruaje, bajo la supervisión del mayordomo, Deverell la guió hasta la puerta principal de la casa, del club. Phoebe miró a izquierda y derecha. El edificio era similar a otras casas en la calle, no tenía nada en especial. El número 12 de Montrose Place no tenía ninguna señal que lo identificara como un club de caballeros adinerados.

—¿Es éste tu club? —Se sintió impulsada a confirmarlo.

—Sí. —Deverell se volvió hacia los demás—. El club Bastion.

En el vestíbulo, recientemente pintado y más bien austero, sin duda masculino, con aquella ausencia de

descargar

Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.