Manhattan Exciting Love by Cristina Prada

Manhattan Exciting Love by Cristina Prada

autor:Cristina Prada [Prada, Cristina]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Erótico, Romántico
editor: ePubLibre
publicado: 2016-02-23T05:00:00+00:00


11

Entro con el paso titubeante e inmediatamente aparto la mirada. Sólo un segundo. La curiosidad y un placer morboso me hacen volver a alzarla y fijarme en cada detalle con atención, en cómo se mece sobre ella, en cómo sus brazos tensos recogen y mantienen cada una de sus embestidas, y en su perfecto cuerpo de dios griego. La espalda de la chica se arquea rozando el contorsionismo. Se separa del colchón y busca desesperadamente aferrarse a su cuerpo, pero él permanece impasible, embistiéndola sin piedad. Ni siquiera follando se baja del pedestal en el que Dios y toda su arrogancia lo han subido. La chica parece estar en otro mundo que sólo le pertenece a Jackson.

Quiero ser esa chica. Lo quiero con todas mis fuerzas.

Él repara en mi presencia y se levanta. La chica gime y echa la cabeza hacia atrás desesperada. Ella también quiere más. Sonríe absolutamente agitada y se pasa las manos por los pechos. Parece que estos minutos con él han sido mejor que horas con cualquier otro hombre.

Jackson camina hasta mí y, sin mediar palabra, sumerge una de sus manos en mi pelo y desliza la otra bajo mi vestido y bajo mis bragas. Estoy tan mojada que entra sin dificultad, rápido y caliente. Gimo absolutamente excitada y alzo las manos. Aún no han tocado su cuerpo cuando Jackson tira de mi pelo, brusco, una sola vez.

—No te muevas —me ordena.

Es tan arrogante, tan exigente, tan arisco, y al mismo tiempo te mira dejándote absolutamente claro que ya le perteneces, incluso antes de saberlo, y simplemente no puedes alejarte de él.

Bombea en mi interior, fuerte, implacable. Gimo. Gimo con fuerza.

—Eres mía. Tu cuerpo es mío. Ahora márchate.

Retira sus dedos de golpe y da un paso hacia atrás. Yo no me muevo. No puedo. ¿Quiere que me marche? ¿Por qué?

Jackson aprieta los labios y su mandíbula se tensa un poco más.

—¿Quieres follar conmigo, Lara? Yo follo así. Y no doy segundas oportunidades.

Una advertencia en toda regla.

Aturdida, creo que incluso conmocionada, giro sobre mis pasos y salgo de la habitación. Ha sido claro y sincero hasta rayar la crueldad. No tengo nada que reprocharle, pero la familiar sensación de que esto me queda demasiado grande regresa como un ciclón.

Vuelvo a la sala principal del club y la atravieso todavía abrumada. Si quería saber si esto siempre será un ordeno y mando, ahí tengo la respuesta. Todas las alarmas de mi cuerpo se encienden y gritan como locas. Tengo que alejarme de él, pero estoy demasiado cerca del santo Grial de la seducción como para marcharme sin aprender nada. Además, una parte de mí, sencillamente, no quiere hacerlo.

—Señorita Archer —me llama el portero con una voz grave, casi afónica.

Yo lo observo confusa.

Él no dice nada más y me señala un taxi aparcado a unos pocos metros.

—Yo no he pedido ningún taxi —trato de explicarle.

Pero él ni siquiera parece escucharme y continúa con la vista al frente.

Miro a mi alrededor. Estamos muy cerca del East River y el viento en esta zona a esta hora de la noche es húmedo y frío.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.