Mafia by Alessandra Neymar

Mafia by Alessandra Neymar

autor:Alessandra Neymar [Neymar, Alessandra]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Juvenil, Romántico
editor: ePubLibre
publicado: 2016-08-01T04:00:00+00:00


33

Cristianno

Arrastré los pies.

Aquel lugar que anteriormente me había parecido demasiado grande, ahora se reducía a un insignificante zulo que me robaba el aliento. Deambulé, no muy lejos de la sala principal, y terminé en una especie de cueva iluminada con una luz anaranjada.

Me apoyé en la barandilla descubriendo que aquel delgado tubo de metal me separaba de un abismo de roca que no parecía tener fin. Justo como mis sentimientos.

Me arrepentía de haberle hablado así a mi padre, de hecho aquella había sido la primera vez. Tal vez por eso le sorprendió tanto. Pero ya no podía volver a atrás, le había hecho daño. No, ambos estábamos dañados, él y yo, y mi abuelo.

—Hijo mío… —La voz de mi padre me inundó con tanta fuerza que creí que me desplomaría. Y la vista se me humedeció como si fuera un puto crío asustado.

Le miré. Ahora no tenía que aparentar ser un tipo duro. Aquel hombre era mi padre, el mismo que había entrado en mi habitación en mitad de la noche y me había protegido de la oscuridad porque sabía que la temía.

—Lo siento… —casi sollocé y creí que terminaría haciéndolo cuando ahuecó su mano en mi mejilla. Cerré los ojos y me dejé llevar por la elegante robustez de su piel.

—No… —Sonrió con tristeza y yo me aferré a su muñeca.

—Es solo que… —intenté decir—. Supongo que tengo algo de miedo.

Y aunque me frustrara era algo que no podía evitar.

—Cualquier hombre lo siente alguna vez.

—¿Incluso tú?

—¿Crees que porque a veces se tema dejas de ser quién eres? —intervino mi abuelo, que se había colgado de Kathia para poder caminar mucho más estable. El cansancio en él era bastante evidente—. Estás muy equivocado, pequeño.

Me froté el cabello. Me desesperaba todo aquello, estaba pensando con demasiada velocidad. Miles de pensamientos, miles de emociones.

—¿Qué clase de hijo tuviste? —siseé creyendo que solo era un pensamiento. Pero resultó que mi abuelo captó muy bien el comentario.

—Lo lamento. —Se disculpó con angustia, captando toda mi atención—. Pero un padre no puede hacer nada si un hijo sale traidor. Solo rezar porque el daño sea mínimo.

<<No, no te justifiques. No tienes la culpa.>> Pero mi consciencia no fue capaz de entenderlo en ese momento.

—¿Rezar? —Resoplé una sonrisa, antes de clavarle una mirada dura y cruel—. Enrico puede morir —mascullé con saña—. Eric puede morir. Mauro… —Tragué saliva antes de señalar la puerta—. Tengo a la mujer de mi vida sufriendo por todos ellos, atrapada y sin salida. —Señalé a Kathia antes de que ella cerrara los ojos—. Y a toda mi familia en peligro. —Empecé a levantar la voz—. ¡¿Quieres que rece?! ¡¿Quieres que le ruegue a un ser que ni siquiera existe?! —Clamé. Pero me hirió hacerlo y ver el daño que habían causado mis palabras en mi abuelo—. Lo siento… Lo siento…

Y me llevé las manos a la cara.

—Cristianno… —Noté la mano de mi abuelo acariciarme la espalda. Se había soltado de Kathia y había venido hasta mí—. No te disculpes por algo que sientes.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.