Protegida by Alena García

Protegida by Alena García

autor:Alena García
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Relato, Erótico
publicado: 2016-09-07T23:00:00+00:00


* * * *

Las semanas transcurrían lentas para Susana. Víctor no había podido quedar con ella ni un solo día más. Tras su paseo por El Retiro, se había ido de viaje con Román a Rusia y estuvieron allí diez días. Después a Japón, otros seis, y ahora estaba en la Costa del Sol, en Puerto Banús.

Se dio cuenta de que ese hombre no hablaba por hablar. Cada palabra que pronunciaba adquiría un sentido profundo. Se lo había dicho bien claro mientras paseaban. Y ella, como una tonta, no había sido capaz de decirle, ese mismo día, o al día siguiente, que sí, que se iba con él, que lo dejaba todo.

Ahora le daba vergüenza, se sentía como una cobarde. Había tenido miedo. Miedo de dejar su empleo, de perder la popularidad, de dejar el embrujo de la cámara. Miedo a sí misma. Su trabajo empezaba a asquearla. No era capaz de escribirle ni una línea. Tampoco lo llamaba. Él la llamó tres días después interesándose por ella. Susana le dijo que tenía un directo en unos minutos y la conversación se terminó de mala manera.

En este caso, no se podía decir que la relación se hubiera enfriado, porque no había habido relación. Una noche y unas horas de paseo al día siguiente no eran, para Susana, una relación. Pero no podía dejar de pensar en ese hombre. Cada día cogía el teléfono y empezaba un mensaje. Distinto cada vez, pero siempre el mismo en el fondo.

Querido Víctor, he decidido irme contigo. Te espero en el aeropuerto. Tuya, Susana.

Mi querido siberiano. ¡Vámonos! Tienes razón, hay que escapar de esta rutina, de este mundo que no nos deja tiempo para nosotros. Te quiero.

Escribió muchos mensajes de este calado, pero acabó borrándolos todos. Pensaba que él no iría porque había escrito tarde. O que le pillaría en uno de sus viajes, o que sería una molestia para él. Ya no sabía qué hacer. Él había dejado la decisión en sus manos.

Estaba segura de que un hombre así, si decía algo, lo cumplía. Se iría con ella al fin del mundo. Lo sentía así. El problema era ella misma. ¿Qué se lo impedía? Al lado de este hombre estaría segura toda la vida. No habrá otro como él.



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