Hijos de la tormenta by Elizabeth Peters

Hijos de la tormenta by Elizabeth Peters

autor:Elizabeth Peters [Elizabeth Peters]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Histórico, Amelia Peabody
publicado: 2015-03-15T13:47:50+00:00


Capítulo 7

- Supongo que después rastrearíais toda la zona meticulosamente -dije mientras decapitaba limpiamente mi huevo pasado por agua-. Aunque tal vez no esté de más que vaya a echar un vistazo por mi cuenta.

Emerson bajó finalmente la tostada que había tenido suspendida en el aire desde que Ramsés había empezado a contarles el asunto del templo de Hator, tal como lo llamaba yo. Su mirada, penetrante y azul, abandonó paulatinamente a su hijo para dejarse caer sobre mí.

- Amelia -dijo.

- Sirve un poco más de café al profesor, Gargery, si eres tan amable.

- No quiero más maldito… -Sí que quería, sin embargo, y por eso dejó la frase a medias. Gargery, que hasta entonces nos había estado escuchando fascinado, se apresuró a complacerme mientras Emerson le decía con el mismo tono suavemente amenazador-: Gracias, Gargery. Ramsés, ¿por qué has esperado hasta el desayuno para contárnoslo?

- Pensamos, todos, que no era necesario despertaros -dijo Nefret, enfatizando la frase de un modo que me hizo sospechar que el acuerdo había sido precedido de una cierta discusión-. No había nada que usted, o que nuestra madre, pudieran hacer en aquel momento. Rastreamos el lugar tan minuciosamente como nos fue posible. No fue fácil, con toda esa gente por allí y sólo las antorchas para iluminarnos, y… y… lo siento, padre.

- Lo siento -repitió Emerson. Se levantó, magistral como Júpiter



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.