El superviviente by Unknown

El superviviente by Unknown

autor:Unknown
La lengua: eng
Format: epub
ISBN: 0000000000000
publicado: 2023-01-11T00:24:39+00:00


− . −

− 4 −

Llega el momento de recopilar información para poder ir sacando conclusiones. Sumemos las siguientes variantes:

1. El atropello de la señora Rosalía se había producido en La Parte de Bureba.

2. El coche había sido escondido en el mismo pueblo, a unos cientos de metros del lugar del impacto.

3. El vehículo con el que habían matado a Rosalía pertenecía a un vecino de una localidad cercana.

Con esos datos sobre la mesa, ¿dónde buscarías, querido lector, al asesino? ¿Cuál habría sido tu siguiente paso? Cierra los ojos y piénsalo. Dale una vuelta durante unos segundos antes de seguir leyendo.

¿Ya?

Ahora comprueba si tus conclusiones son las que tuvieron los investigadores:

Con la información que de momento he compartido contigo y que en ese momento tenían los investigadores, la hipótesis más probable es que el asesino viviese en La Parte de Bureba. Era donde había que buscar. Abel y su equipo así lo creyeron y se encaminaron al pueblo. Tenían que hablar con los vecinos. Una localidad tan pequeña, de apenas 193 habitantes, muchos de los cuales siquiera viven allí, sin duda tiene su idiosincrasia, su propia esfera de vida, su microcosmos de rencillas, peleas, antiguas disputas por lindes… La Parte de Bureba guardaba muchos secretos y los agentes, si querían avanzar, debían aflorarlos.

—Antes de visitar La Parte de Bureba —me contó Abel—, por protocolo y porque era obvio que había que hacerlo, miramos en la base de datos si Rosalía tenía alguna denuncia, ya la hubiese puesto ella como víctima o, al contrario, que la mujer hubiese sido objeto de la acusación de alguien. Quizá nos podía dar un móvil y también, en función del número de denuncias, nos podía indicar si era una mujer tranquila o conflictiva. Nos encontramos con una única denuncia. La había puesto ella contra un vecino del pueblo, un tal Ángel Ruiz, pero tiempo después la había retirado y figuraba como cancelada. El hecho de que hubiese denunciado a un paisano de la localidad no convertía a ese vecino en el asesino, pero eran datos que debíamos mirar y tener en cuenta.

Alfredo, el hijo de la señora Rosalía, recuerda perfectamente el origen de esa denuncia que finalmente fue cancelada.

—Un día pillé a Ángel cruzando con su tractor por medio de una de mis fincas que estaba plantada de girasoles —relató Alfredo Soto, el hijo de Rosalía—. Debería haber circulado por el camino como cualquier persona normal, pero no, él pisoteó toda mi plantación y a partir de ahí saltó el cisco.

El tal Ángel no es una persona con la que se pueda hablar con facilidad, ni dialogar para encontrar una solución. Al revés, muchos de los habitantes de La Parte evitaban el conflicto con él porque, precisamente, tenía un pronto extraño.

—Me fui a hablar con doña Pilar, la madre de Ángel —siguió contando Alfredo—. Simplemente le informé de lo que había pasado, que no era normal que pasase con el tractor por mitad de los sembraos de los demás. Le pedí que hablase con su hijo, que le hiciese entrar en razón y que le reprendiese porque esas no eran formas de comportarse.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.