El Lobo Estepario by Hermann Hesse

El Lobo Estepario by Hermann Hesse

autor:Hermann Hesse [Hesse, Hermann]
La lengua: eng
Format: mobi, epub
Tags: Psicología, Novela, ePub, Mobi. eBook's
editor: eBook's Xibalba
publicado: 2014-09-09T06:00:00+00:00


* * *

Como el gramófono echaba a perder en mi cuarto de estudio el aire de ascética espiritualidad, como los bailes americanos irrumpían extraños y perturbadores, hasta destructores, en mi cuidado mundo musical, así penetraba de todos lados algo nuevo, temido, disolvente en mi vida hasta entonces de trazos tan firmes y tan severamente delimitada. El tratado del lobo estepario y Armanda tenían razón con su teoría de las mil almas; diariamente se mostraban en mí, junto a todas las antiguas, algunas nuevas almas más; tenían aspiraciones, armaban ruido, y yo veía ahora claramente, como una imagen ante mi vista, la quimera de mi personalidad anterior. Había dejado valer exclusivamente el par de facultades y ejercicios en los que por casualidad estaba fuerte y me había pintado la imagen de un Harry y había vivido la vida de un Harry, que en realidad no era más que un especialista, formado muy a la ligera, de poesía, música y filosofía; todo lo demás de mi persona, todo el restante caos de facultades, afanes, anhelos, me resultaba molesto y le había puesto el nombre de «lobo estepario».

A pesar de todo, esta conversión de mi quimera, esta disolución de mi personalidad, no era en modo alguno sólo una aventura agradable y divertida; era, por el contrario, a veces amargamente dolorosa, con frecuencia casi insoportable. El gramófono sonaba a menudo de una manera verdaderamente endiablada en medio de este ambiente, donde todo estaba templado a otros tonos tan distintos. Y alguna vez, al bailar mis onesteps en cualquier restaurante de moda entre todos los elegantes hombres de mundo y caballeros de industria, me resultaba yo a mí mismo un traidor de todo lo que durante la vida entera me había sido respetable y sagrado. Si Armanda me hubiera dejado solo, aunque no hubiera sido más que una semana, me hubiese vuelto a escapar muy pronto de estos penosos y ridículos ensayos de mundología. Pero Armanda estaba siempre ahí, aunque no la veía todos los días, siempre era yo observado, dirigido, custodiado, sancionado por ella; hasta mis furiosas ideas de rebeldía y de huida me las leía ella, sonriente, de mi cara.

Con la progresiva destrucción de aquello que yo había llamado antes mi personalidad, empecé también a comprender por qué, a pesar de toda la desesperación, había tenido que temer de modo tan terrible a la muerte, y empecé a notar que también este horrible y vergonzoso miedo a la muerte era un pedazo de mi antigua existencia burguesa y fementida. Este señor Haller de hasta entonces, el escritor de talento, el conocedor de Mozart y de Goethe, el autor de observaciones dignas de ser leídas sobre la metafísica del arte, sobre el genio y sobre lo trágico, el melancólico ermitaño en su celda abarrotada de libros, iba siendo entregado por momentos a la autocrítica y no resistía por ninguna parte. Es verdad que este inteligente e interesante señor Haller había predicado buen sentido y fraternidad humana, había protestado contra la barbarie de la guerra,



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.