Amor y otras estúpidas palabras by Elena Montagud

autor:Elena Montagud [Montagud, Elena]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Romántico, Erótico
editor: ePubLibre
publicado: 2024-01-11T00:00:00+00:00

21

Chiflados

«Personas que han perdido el juicio o se comportan como tales». Al final de la definición, quizá encuentres las fotos de Eva Martínez y Sebastian Wright.

—Me parece que estás equivocándote porque yo no he hecho tal cosa. —⁠Miento descaradamente⁠—. Quería coger el plato de carne y tú no te apartabas.

Sebastian compone una mueca de hastío.

—¿Sabes lo que dirían si se diera el caso contrario? —⁠replica⁠—. Me tacharían de acosador. Primero lo del pub cuando nos conocimos, más tarde lo de comer M&M’s de forma provocativa y ahora… lo de esta noche.

—¡¿Perdona?! ¡Has sido tú el que me ha tocado el labio, y… y me ha abrazado por detrás y luego… luego…!

A punto estaba de soltar que he notado algo en su entrepierna, pero me contengo. No puede ser cierto porque tampoco es que haya ocurrido nada como para que se pusiera así. A no ser que sea un voyeur y se haya excitado con el espectáculo de Víctor y Marta. Además, después lo he mirado a la cara y estaba tan tranquilo. A lo mejor me he confundido… ¡¿Y qué dice de los M&M’s? ¿Desde cuándo me los comía de manera provocativa?! ¿Y por qué no menciona que hubo una noche en que él me besó a mí? Es un espabilado.

—Me has pedido que fingiera que me atraes y que fuera más cariñoso contigo. Disculpa por ser tan buen actor. —⁠Ironiza con las manos alzadas.

Me dispongo a pasar para irme a la cocina a fregar, pero me corta el paso.

—¿No vas a darme ninguna explicación de esta noche tan extraña? Me has invitado a cenar con vosotros por interés, ¿verdad? No porque te sintieras incómoda. —⁠Ha sonado realmente molesto.

—¡Por supuesto que me sentía incómoda! ¿Es que acaso no los has visto? Se metían la lengua hasta la campanilla —⁠musito. Sebastian descruza los brazos y me mira con atención⁠—. Puede que luego me haya equivocado con la chorrada que te he pedido. Yo no soy así, pero es que me molesta la actitud de Víctor y…

—A mí no me molesta que mis amigos se besen con quien sea. Así que… estás mintiendo. Ya lo noté el otro día en Nevermind, que había algo raro tanto en su actitud hacia ti como en la tuya para con él. —⁠Frunce el ceño y me pregunta⁠—: ¿Quién es Víctor en realidad? ¿Tu exnovio? ¿Un amigo que te gusta?

Decido sincerarme con él porque, al fin y al cabo, me ha seguido la corriente y ha tratado de ayudarme, aunque no de la forma que me había esperado.

—Víctor es mi… Sí, es mi amigo y, bueno, hasta hace poco éramos amigos con derecho a roce. Y… no sé, es que yo… No es que yo pensara que fuéramos en serio, pero creía que… Vale, en realidad me hice ilusiones, y él aseguró que jamás se enamoraría y ahora… pues… —⁠Suspiro porque jamás me ha costado tanto expresarme, pero la situación y la cara de Sebastian juzgándome no ayudan⁠—. Bueno, no importa. Pero sí, es verdad que

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