Instrucciones para los soldados británicos en Alemania, 1944 by Comité Político de Guerra

autor:Comité Político de Guerra [Comité Político de Guerra]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Referencia, Ciencias sociales
editor: ePubLibre
publicado: 2005-08-14T16:00:00+00:00

—¿QUÉ PIENSAN LOS ALEMANES DE NOSOTROS?—

SI OBVIAMOS las opiniones extremistas de los nazis, la visión básica que los alemanes tienen de los británicos es algo así: los británicos no trabajan tan duro como los alemanes ni se toman su trabajo tan en serio.

Los británicos no se organizan tan bien como los alemanes. (De hecho, los alemanes tienden a organizarse en exceso; esta guerra ha demostrado que nuestra forma de organizarnos, cuando de verdad nos ponemos a ello, es igual de meticulosa y más flexible).

No obstante, los alemanes en general admiran a los británicos. Los esfuerzos del Ministerio de Propaganda alemán para suscitar odio contra nosotros no han tenido demasiado éxito, a pesar de los bombardeos de la RAF. Es probable que de entre todos los ejércitos de ocupación de las Naciones Unidas, seamos nosotros y los estadounidenses los mejor considerados.

Hasta Hitler sentía respeto por nosotros, como admitía a regañadientes en su Mein Kampf. Envidiaba al Imperio Británico y admiraba las virtudes nacionales que lo forjaron: imaginación, iniciativa y una resistencia tenaz. Él creía que nos habíamos vuelto decadentes y que las habíamos perdido. Nuestras fuerzas combatientes —y los civiles, en casa— han demostrado lo contrario.

Los alemanes consideran que tenemos otras virtudes nacionales. Piensan que somos justos, decorosos y tolerantes, y que ejercemos la política con sentido común.

Ahora que el sueño nazi de conquistar el mundo ha sido reducido a añicos, estas sencillas virtudes resultan aún más atractivas, y hoy por hoy, es probable que muchos alemanes admitieran que su ideal para la nueva Alemania es algo parecido a Gran Bretaña.

Mientras estéis de servicio en Alemania, sois representantes de Gran Bretaña. De vuestro comportamiento depende la opinión que tengan de nosotros.

No es que nosotros valoremos su opinión en sí misma. Pero a los alemanes les conviene ver que los soldados de la democracia británica son respetables y serenos, que en su trato con una nación conquistada pueden ser firmes, justos y correctos. Los alemanes tendrán que volverse justos y correctos, si más adelante queremos convivir con ellos en paz.

Sin embargo, los alemanes tienen otra idea predilecta. Sostienen que somos naciones hermanas, nos consideran «primos». Esto forma parte de su teoría de la superioridad de las razas del norte.

El parecido, si es que existe, es meramente superficial. Cuanto más hondo excaves en el carácter alemán, más te darás cuenta de lo distintos que son a nosotros. De modo que no te dejes engañar por las primeras impresiones.

Los alemanes ven a los estadounidenses de forma bastante similar a como nos ven a nosotros, pero a ellos no les conocen tan bien y muchas de sus ideas las han tomado de las películas de Hollywood, que en su día eran muy populares en Alemania. Ésa es la razón de que crean, por ejemplo, que todos los estadounidenses son ricos. Su idea inicial de que las tropas estadounidenses estaban compuestas por soldados «aficionados» ha sido totalmente desmentida por la experiencia en la batalla.

La actitud alemana hacia los rusos es muy distinta. Bajo el poder de Hitler se les enseñó a considerar a los rusos seres subhumanos.

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