En busca de consuelo: vivir con esperanza en tiempos oscuros by Michael Ignatieff

En busca de consuelo: vivir con esperanza en tiempos oscuros by Michael Ignatieff

autor:Michael Ignatieff [Ignatieff, Michael]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Ensayo, Filosofía
editor: ePubLibre
publicado: 2021-01-01T00:00:00+00:00


Pero ¿cómo se iba a cambiar la naturaleza humana? Poco después de la llegada de Marx a París, le pidieron que escribiera una crítica del libro La cuestión judía, de un antiguo profesor y socio suyo, Bruno Bauer. Aprovechó este encargo como una oportunidad para resolver, en efecto, cómo superar identidades tan aldeanas como el judaísmo y convertirse en lo que la revolución requería: seres humanos verdaderamente libres. Como era joven, Marx creyó que sería fácil. Si él se había emancipado del judaísmo, ¿por qué no podía todo el mundo liberarse de las identidades reaccionarias que lo mantenían cautivo?

Al fin y al cabo, ¿qué significaba ser judío? Desde su punto de vista, la esencia del judaísmo era la buhonería. Los judíos vivían por y para el comercio y los negocios. Su Dios era el dinero. ¿Seguirían existiendo los judíos si se aboliera el sistema monetario, se eliminara el capitalismo y se sustituyera la propiedad privada? La respuesta saltaba a la vista: el judaísmo se disiparía como «un vapor turbio» en una sociedad verdaderamente libre. El judaísmo y todas las divisiones entre los seres humanos, todas las líneas divisorias que impiden que las personas se reconozcan como hermanos y hermanas, desaparecerían si se eliminara la raíz del problema: el capitalismo.

Hacía poco de la publicación de La democracia en América, de Alexis de Tocqueville, que enseñó a Marx que «el Estado puede ser un Estado libre sin que el hombre sea un hombre libre». ¿Cómo podían ser libres los hombres si seguían atrapados en la telaraña del engaño religioso, aunque lo eligieran libremente? En un futuro comunista, ser libre significaría estar libre de la necesidad de los engaños de la religión y sus falsos consuelos.

Marx escribió que, en la revolución política de 1789, «los derechos del hombre no emancipan, pues, al hombre de la religión, sino que le dan la libertad religiosa, le procuran la libertad de propiedad, no le liberan de la tara de tener que ganarse la vida». La hostilidad de Marx hacia la tolerancia religiosa concedida a los judíos y a otros durante la Revolución francesa le duraría toda la vida. En 1875, seis años antes de su muerte, condenó el Programa de Gotha de los socialdemócratas alemanes por apoyar la tolerancia religiosa. Creía que debían abolir la religión por completo.

Su utopía estaba dedicada a superar las fricciones, la guerra de todos contra todos, raza contra raza, religión contra religión, nación contra nación, dentro de la sociedad civil. Lo que a otros les gustaba más de la modernidad —los frenéticos empellones entre los pueblos que compiten entre sí en la ciudad moderna— a Marx le llenaba de consternación:

¡Qué espectáculo! La subdivisión progresiva al infinito de la sociedad en las más variadas razas, que están una frente a la otra con pequeñas antipatías, mala conciencia y mediocridad brutal…



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.