Breve historia de la Guerra de la Independencia by Carlos Canales Torres

autor:Carlos Canales Torres [Canales Torres, Carlos]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Divulgación, Historia
editor: ePubLibre
publicado: 2006-02-01T05:00:00+00:00

Alba de Tormes y el hundimiento del Ejército de la izquierda.

Ajeno a lo que ocurría al sur, el Ejército de la Izquierda del duque del Parque salió de su refugio montañoso y avanzó de nuevo sobre Salamanca, que la guarnición del general Marchand abandonó otra vez para unirse a Kellermann, que se dirigía en su socorro, en Medina del Campo. Cerca de la localidad castellana hubo un breve combate entre las avanzadas españolas y los hombres de Kellermann, pero conocedor ese día de la tremenda derrota de Ocaña, Del Parque se dio cuenta de lo que iba a ocurrir con su pequeño ejército y optó por volver al seguro refugio de la sierra. Sin embargo, no le iba a resultar fácil. El 28 de diciembre la vanguardia de caballería de Kellermann le alcanzó en Alba de Tormes cuando tres de sus cinco divisiones estaban aún en la orilla oriental. Aun a pesar de que carecía de infantería, el general francés lanzó a su caballería contra los españoles a los que causaron 3000 bajas entre muertos, heridos y prisioneros, aunque el resto de la infantería logró finalmente formar en cuadro. Tras una serie de escaramuzas libradas para evitar que los españoles escaparan en espera de la llegada de la infantería francesa, los acosados soldados de Del Parque sabían lo que iba a ocurrir y se lanzaron a intentar pasar a la orilla occidental cuando anochecía. Cayeron decenas de ellos, pero la mayoría logró escapar por apenas minutos. El puente de Alba de Tormes, protegido por la retaguardia del general Del Parque, cayó al primer asalto de la infantería francesa, lo que, unido a los desastres anteriores, tuvo un efecto demoledor para la moral española. Antes de llegar a las montañas miles de hombres desertaron. Pero lo peor estaba por llegar. Obligado a refugiarse y pasar el invierno en los fríos y desolados montes entre Ciudad Rodrigo y Plasencia, en un terreno pobre y sin apenas recursos, millares de hombres más fallecieron de infecciones, enfermedad y desnutrición. El Ejército de la Izquierda se deshacía.

La derrota de Ocaña y el fracaso en Alba de Tormes fueron una catástrofe y la Junta no pudo detener la oleada de críticas. Los éxitos menores como la victoria de Tamames no podían ocultar el desastre. Andalucía estaba abierta a los ejércitos franceses y no había nada con lo que detenerlos. Austria se había rendido y los británicos habían abandonado otra vez a los españoles a su suerte.

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