Un tranvía llamado Deseo El zoo de cristal (Artes escénicasObras) (Spanish Edition) by Tennessee Williams

Un tranvía llamado Deseo  El zoo de cristal (Artes escénicasObras) (Spanish Edition) by Tennessee Williams

autor:Tennessee Williams [Williams, Tennessee]
La lengua: spa
Format: azw3
ISBN: 9788484288220
editor: Alba Editorial
publicado: 2013-03-31T16:00:00+00:00


Segunda escena

Son las seis de la tarde siguiente. Blanche se está bañando, Stella, terminando de asearse. El vestido de Blanche, con un estampado de flores, está sobre la cama de Stella.

Stanley entra en la cocina desde la calle, dejando la puerta abierta. Se oye el sempiterno «piano de los blues».

STANLEY: ¿A qué viene tanta tontería?

STELLA: ¡Oh, Stan! (Se pone en pie de un salto y da a Stanley un beso que éste acepta con altanería.) Voy a llevar a Blanche a Galatoire’s a cenar y luego a ver algo, porque es tu noche de póquer.

STANLEY: ¿Y qué pasa con mi cena, eh? ¡Yo no me voy a Galatoire’s a cenar!

STELLA: Te prepararé un plato frío y lo dejaré sobre una bandeja con hielo.

STANLEY: ¡Vaya, qué cosa tan elegante!

STELLA: Intentaré no volver hasta que terminéis la partida. No sé cómo se lo tomaría Blanche, así que después iremos a uno de esos pequeños locales del Barrio. Tendrías que dejarme un poco de dinero.

STANLEY: ¿Dónde está?

STELLA: Se está dando un baño para calmar los nervios. Está muy disgustada.

STANLEY: ¿Por qué?

STELLA: Ha sufrido mucho.

STANLEY: Ah, ¿sí?

STELLA: Stan, hemos… ¡perdido Belle Reve!

STANLEY: ¿La casa de campo?

STELLA: Sí.

STANLEY: ¿Cómo?

STELLA (con vaguedad): Oh, había que… sacrificarla o algo así. (Se produce una pausa en la que Stanley se queda pensativo. Stella se está poniendo su vestido.) Cuando entre, dile algo bonito. Y, ah, no le digas nada del niño. Yo todavía no se lo he dicho, prefiero esperar a que esté más tranquila.

STANLEY (muy serio): ¿Y eso?

STELLA: Y trata de comprenderla y sé amable con ella, Stan.

BLANCHE (cantando en el baño):

De la tierra del agua azul cielo,

una dama cautiva trajeron.

STELLA: No esperaba que la casa fuera tan pequeña. En mis cartas exageré un poco las cosas.

STANLEY: Ah,¿ sí?

STELLA: Y dile que te gusta su vestido y que está maravillosa. Es muy importante para Blanche. ¡Es su pequeña debilidad!

STANLEY: Ya, me hago a la idea. Y ahora vamos a dar marcha atrás un poquito… Así que ya no tenéis la casa de campo.

STELLA: ¡Oh, sí…!

STANLEY: ¿Qué ha pasado? Dame más detalles.

STELLA: Es mejor no hablar demasiado de ello hasta que esté más tranquila.

STANLEY: Conque ése es el trato, ¿eh? ¡A la hermana Blanche no se la puede molestar con detalles de dinero por ahora!

STELLA: Anoche ya viste cómo estaba.

STANLEY: Sí, vi cómo estaba. Pero ahora vamos a echarle un vistazo a la factura de venta.

STELLA: No la tengo, no la he visto.

STANLEY: ¿No te ha enseñado ningún documento, ningún contrato de venta ni nada parecido?

STELLA: Parece ser que no se vendió.

STANLEY: ¿Y entonces qué demonios ha pasado con la casa? ¿La han regalado? ¿A quién, a una organización benéfica?

STELLA: ¡Chist! ¡Que te va a oír!

STANLEY: Me da igual que me oiga. ¡Déjame ver los papeles!

STELLA: No hay papeles, no me ha enseñado ningún papel, no me importan los papeles.

STANLEY: ¿Has oído hablar del código napoleónico?

STELLA: No, Stanley, no he oído hablar del código napoleónico y aunque lo hubiera hecho, no sé que tiene eso…

STANLEY: Deja que te ilustre en un par de cosas, nena.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.