Tony Takitani by Haruki Murakami

Tony Takitani by Haruki Murakami

autor:Haruki Murakami [Haruki Murakami]
La lengua: spa
Format: epub
ISBN: 9788490667637
editor: 2019
publicado: 2019-09-29T16:00:00+00:00


Sobre su matrimonio no se proyectaba sombra alguna. Su trabajo seguía como siempre, ellos dos no se peleaban nunca. Solían salir a pasear, iban al cine, viajaban. Considerando su edad, ella era bastante buena ama de casa y sabía dar una respuesta acertada a cualquier cuestión. Desempeñaba con eficacia las labores domésticas y no le creaba a su marido ningún problema superfluo. Con todo, había una cosa, una única cosa, que preocupaba a Tony Takitani. Y era que compraba demasiada ropa. No es exagerado decir que, cuando veía un vestido, casi no podía contenerse. La expresión de su cara cambiaba de súbito, incluso se le alteraba la voz. La primera vez que lo notó, Tony Takitani casi pensó que se había sentido indispuesta de repente. Esa tendencia ya la tenía antes de casarse, pero fue durante la luna de miel en Europa cuando tomó proporciones alarmantes. Durante el viaje, ella compró ropa hasta cansarse. En Milán y París, de la mañana a la noche, recorrió las boutiques como una posesa. No vieron nada. No fueron ni al Duomo ni al Louvre. El único recuerdo que tenía Tony Takitani del viaje eran las tiendas de ropa. Valentino, Missoni, Saint-Laurent, Givenchy, Ferragamo, Armani, Cerruti, Gianfranco Ferré… Como hechizada, ella compraba un traje tras otro mientras él iba detrás pagando las facturas. Casi temía que la banda magnética de la tarjeta de crédito acabara desgastándose por el uso.

Esa fiebre no se aplacó cuando regresaron a Japón. Todos los días iba de compras. El número de trajes que poseía experimentó un incremento acelerado. En consecuencia, tuvieron que encargar varios armarios roperos más. También hicieron construir zapateros. Pero pronto los armarios no fueron suficientes y tuvieron que acondicionar un cuarto entero como vestidor. No obstante, la casa era grande y sobraban las habitaciones. Tampoco les faltaba el dinero. Además, su esposa vestía con un gusto exquisito. Y sólo con tener ropa nueva ya era feliz. Así que Tony Takitani no encontraba nada que objetar al respecto. «En fin, no hay nada de malo en ello», pensó. «En este mundo nadie es perfecto.»



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.