Felidae by Akif Pirinçci

Felidae by Akif Pirinçci

autor:Akif Pirinçci [Pirinçci, Akif]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Policial
editor: ePubLibre
publicado: 1988-12-31T16:00:00+00:00


8

Pasé el resto de la noche durmiendo o, para ser más exactos, soñando. En realidad, ni siquiera puede hablarse del resto de la noche, pues había comenzado a amanecer cuando volví a entrar por la ventana del baño. Tenía tanta hambre que habría sido capaz de comerme un caballo entero. Pero como Gustav decía repetidamente y con énfasis que quería dormir hasta la hora que le diera la gana «por lo menos los domingos» (lo que era una verdadera tontería, ya que ese tipo duerme casi todos los días hasta las tantas), no me atrevía a llamar su atención sobre mi indigencia. Así que corrí al dormitorio y me dejé caer sobre la manta de lana suave donde se envolvía una albóndiga de grasa que roncaba que daba miedo. La tormenta había pasado y caí rápidamente en un sueño profundo y pesado.

Para mi gran alivio, esa vez no me vi acosado por una pesadilla. En su lugar tuve una especie de visión.

De nuevo me encontraba dentro de un blanco radiante y sin formas en el que no existían el espacio, el tiempo ni la realidad. Pero al contrario del sueño en el que el hombre sin cara me había estrangulado con el collar de diamantes, faltaba por completo la amenaza latente. Unas brumas densas cruzaban a intervalos el extraño lugar, cubriendo lo blanco aquí y allá con sus sombras de color gris claro. Yo deambulaba eufórico por esa nada y, mientras más me adentraba en ella, con más fuerza surgía en mí una intensa pero agradable sensación de expectativa. A veces me envolvían las brumas y me dejaban desorientado. Pero, de todos modos, no había allí ningún punto de referencia, de manera que no me molestaba demasiado.

Me abandonó repentinamente la sensación de expectativa cuando me pareció poder divisar a lo lejos la causa y la solución a la vez. Ya no sabía siquiera cuál era el fin que había perseguido con mi paseo ni a quién esperaba encontrar, pero al verlo, de pronto se me hizo evidente que toda la expectación que se había ido acumulando dentro de mí estaba precisamente orientada hacia ese encuentro. Por supuesto que no era real, y aunque estaba soñando me daba cuenta de ello. Porque ni lo conocía ni tenía una idea clara de su apariencia física. Sin embargo, en aquel momento lo sabía con una certeza que no había experimentado en toda mi vida. ¡Por fin lo había encontrado!

Su pelaje era de una hermosura indescriptible, sí, en verdad, majestuosamente sedoso y de un color blanco que no era de este mundo. Tan radiante que, al mirarlo, lastimaba los ojos. Como se encontraba sentado de espaldas a mí, se fundía de vez en cuando con el trasfondo también blanco, dando así la impresión de ser un fantasma oscilante. Era bien parecido y seductoramente hermoso. En resumen, un magnífico ejemplar que toda agencia de publicidad habría querido contratar. Nubes de brumas lo rodeaban como a una montaña sagrada.

Al detenerme a pocos metros de él, se



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.