Cuentos chinos by Andrés Oppenheimer

Cuentos chinos by Andrés Oppenheimer

autor:Andrés Oppenheimer [Oppenheimer, Andrés]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Divulgación, Ciencias sociales
editor: ePubLibre
publicado: 2005-08-31T16:00:00+00:00


La visión de Washington

Mi conversación con el presidente argentino no fue la única sorpresa que me llevé en esa cumbre. La otra fue la cobertura que había hecho la prensa argentina, según la cual la reunión de Kirchner y Bush durante el evento había sido un éxito rotundo. «El gobierno mejoró los lazos con EE. UU.», tituló La Nación el 15 de enero, señalando en el texto de su artículo de primera plana que «el gobierno calificó ayer como un “éxito total” la participación de Néstor Kirchner en la Cumbre de las Américas». El diario de mayor circulación en el país, Clarín, titulaba: «Bush dio un nuevo apoyo, pero pidió una señal clara por la deuda»[21], y señalaba en su análisis del viaje que «Kirchner sorteó bien su segunda reunión en siete meses con el jefe de la Casa Blanca»[22].

Sin embargo, los altos funcionarios del gobierno de Bush en la reunión nos decían algo totalmente diferente a los periodistas de medios de los Estados Unidos. En efecto, la reunión de Kirchner con Bush había sido civilizada, y hasta buena, me dijo ese día en Monterrey uno de los principales funcionarios de la Casa Blanca para América latina. Pero pocas horas más tarde, cuando Kirchner leyó un discurso en el que prácticamente culpaba a los Estados Unidos por los males de la región, y exigiendo un Plan Marshall para América latina, el ambiente positivo que se había generado se disipó en cuestión de segundos. A tal punto que Bush se había quitado los audífonos de traducción simultánea en la mitad del discurso, según me confirmaron luego funcionarios de la Casa Blanca que se encontraban a su lado.

«Habían tenido una muy buena reunión bilateral, al margen de la cumbre, y luego Kirchner dio un discurso de cierre que fue tan peronista de la vieja guardia, que no sólo el presidente Bush sino muchos otros se preguntaron si éste era el mismo personaje con el que se habían reunido minutos antes», me dijo un alto funcionario de los Estados Unidos. «Había un ambiente de decepción en la delegación estadounidense. Habíamos estado haciendo progresos, el presidente Bush se había jugado por Kirchner ante el Fondo Monetario Internacional, y ahora se venía con ese discurso».

Otro funcionario, el entonces embajador especial de la Casa Blanca para América latina, Otto Reich, me confirmaría más tarde en una entrevista que «la reacción en la delegación de los Estados Unidos fue de incredulidad ante la retórica tan anticuada del presidente argentino. Fue un discurso tercermundista, de los años sesenta»[23]. Reich agregó que «lo que afectó la percepción de la delegación norteamericana tan negativamente fue que el discurso de Kirchner tuviera lugar en la clausura de la Cumbre de las Américas», que el presidente argentino tenía a su cargo como representante del país huésped de la próxima cumbre, que se realizaría en la Argentina en noviembre de 2005. «La cumbre había estado dedicada a promover el desarrollo, y todo el día y medio se había estado hablando de cosas como



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.