Agrietar el capitalismo by John Holloway

Agrietar el capitalismo by John Holloway

autor:John Holloway
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Divulgación
publicado: 2011-12-29T23:00:00+00:00


La dominación del trabajo abstracto es el autoencierro del movimiento anticapitalista.

El movimiento del trabajo abstracto contra el capital es el acertadamente denominado movimiento obrero*. En el movimiento obrero, la existencia del trabajo abstracto es típicamente dada por sentada, de modo que allí reina un concepto unitario de trabajo. La dicotomía entre el hacer útil y el trabajo abstracto es ignorada por completo, tanto en la teoría como en la práctica; la superación del trabajo abstracto —si es que se pone en discusión— se proyecta hacia el futuro.

Desde los primeros días del capitalismo industrial, los trabajadores empleados por los capitalistas se han unido para luchar por mejores condiciones, salarios más altos, jornadas laborales más cortas, y otras reivindicaciones. La forma típica de organización es el sindicato, una forma de organización jerárquica y en general burocrática. La lucha del trabajo abstracto es ante todo una lucha por el empleo: una lucha por mejores condiciones de empleo, por salarios más altos, por más empleo, una lucha contra la desocupación. Estas luchas son importantes y afectan las condiciones de vida de millones de personas en todo el mundo. No obstante, son luchas que dan por sentada la reproducción de la dominación capitalista, la subordinación de nuestro hacer al control ajeno, la constante abstracción del hacer en trabajo.

La lucha sindical no es la única forma de lucha del trabajo en contra del capital. Los revolucionarios siempre han argumentado que la lucha sindical no es suficiente, que la lucha sindical no hace más que defender las condiciones del trabajo asalariado, mientras que es necesario luchar por la abolición del trabajo asalariado y la explotación. La lucha sindical es una lucha económica que necesita ser complementada con la lucha política. Esta lucha política es la lucha por tomar el poder estatal y, así, mediante el poder del Estado, socializar los medios de producción y abolir el trabajo asalariado Este es el modelo clásico de revolución de la Segunda, la Tercera y la Cuarta Internacional Es el modelo no sólo de Lenin, sino de todos los principales revolucionarios de finales del siglo XIX y de la primera parte del siglo XX. La separación entre lucha sindical o económica por un lado y lucha política o revolucionaria por el otro es una piedra angular en la teoría de la revolución de Lenin, tal como fue esbozada en el ¿Qué hacer? de 1902 Pero no se trata sólo de Lenin: Rosa Luxemburgo es un interesante ejemplo a tomar, no para criticarla en particular, sino, sencillamente, porque ella es quizá —y de forma comprensible— la revolucionaria más ampliamente admirada del período clásico. En 1906 Luxemburgo insiste —incluso en su panfleto sobre La huelga de masas (1970)—, en la separación entre la lucha política y la lucha económica.

En la separación entre la lucha política y la lucha económica la transformación de nuestro hacer en trabajo abstracto —que está en el centro del capitalismo—, simplemente se pierde de vista. No está presente en la idea de la lucha económica porque la lucha económica trata de mejorar las condiciones del trabajo asalariado.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.