No dejar que se apague el fuego by Miriam Toews

No dejar que se apague el fuego by Miriam Toews

autor:Miriam Toews [Toews, Miriam]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Realista
editor: ePubLibre
publicado: 2023-10-01T00:00:00+00:00


10

Bueno, ¿cuándo fue eso? A ver. Tengo el vago recuerdo de que yo acababa de volver a casa de Rosenort, del funeral de Knipstja… Era mayor ya, así que no fue ninguna sorpresa… Y tu madre estaba esperándome en la entrada de mi bloque, el que había al lado del río y tenía forma de cartón de leche, con ese casero horrible. Momo había muerto. Sí, ya había muerto esa primavera. Lo del funeral de Knipstja fue en verano. Tu madre y yo estábamos que… no éramos nosotras. ¡Normal! Habíamos perdido a Momo. Ay… bueno, es que Momo peleó duro, muy duro. Siempre andaba haciendo bromas y contando chistes. ¿Te acuerdas del chiste ese? Es verdad que tú eras pequeña, puede que demasiado para acordarte… Y tu madre y yo estábamos conmocionadas. Bueno, conmocionadas exactamente no, lo habíamos visto venir, pero… Las tres habíamos estado peleando duro. Momo la que más. Pero perdimos. ¡Nosotras perdimos! ¿Tomó Momo la decisión de dejar de pelear? ¿Fue una decisión consciente? Bueno, nunca lo sabremos. Yo diría que sí. Yo diría que sí y podemos respetarlo. Podemos aceptarlo. Bueno… El caso es que los médicos no lucharon duro. No tenían ni idea de nada. No les vengas con historias de enfermedades mentales. No tienen ni idea. ¡Y no te hacen caso! Mejor para eso lee a Virginia Woolf. Pero yo era consciente de que tu madre estaba…, cómo te diría…, bueno, diezmada, en definitiva. Momo era su…, yo diría que era su mejor amiga. Es que eran auténticas compinches. Nos quedamos todos que… no éramos nosotros… A ver, es que ¡un poco de por favor! Pero a tu madre le pasaba algo más. Perder a su hermana fue… Porque hay muertes y muertes… y esa… cambió algo dentro de tu madre. Yo creo que estaba aterrada. Tenía miedo de que le pasara también a ella. Como si fuera contagioso. Primero tu abuelo, luego Marijke, luego Momo… Así que a tu madre le entró mucha angustia. Se asustó mucho de que, en fin, de que perdiera ella también la cabeza… y le pasara otra vez. A ella.

¿Puede una volver a encontrar la cabeza cuando la pierde? Claro que sí. ¡Eso es la vida! En fin…, entonces pareció como si tu madre empezara un proceso de… bueno, de matarse, la verdad. A ver, no matarse, no, no, no…, no me refería a eso, Swiv, sino en el sentido de matar a su yo, como para no… tener que matar a su yo físico. Si me apuras, acabar con su vida tal y como la había vivido hasta entonces. Pero sin acabar su vida como tal, claro, sino… acabar algo dentro de sí misma para poder protegerse. ¿Tiene algún sentido? Y eso es más que nada supervivencia.

Juuuuuu… En fin, ¿por dónde iba? Ah, sí, que a tu madre me la encontré en la entrada del edificio después del funeral de Knipstja. Recuerdo que pensé que estaba muy delgada. Pero es que llevaba vaqueros de pitillo. ¡Limpiapipas por piernas! Y llevaba el brazo escayolado.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.