Medianoche by Derek Landy

autor:Derek Landy [Landy, Derek]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Aventuras, Fantástico, Juvenil
editor: ePubLibre
publicado: 2018-05-28T16:00:00+00:00

38

NO ERA FÁCIL ENTRETENER a una niña de siete años. Alice revoloteaba de juego en juego como una mariposa, con los ojos brillantes. Al principio pareció contentarse con ver la televisión, pero se aburrió rápidamente. Luego quiso jugar a algo en su tablet. Después le pidió a Omen que jugara, y a él le dio la risa al darse cuenta de lo inútil que era para aquellas cosas.

De pronto, le preguntó si quería que actuase para él. Cantó dos canciones de Disney —una de ellas, dos veces seguidas—, un fragmento de Ed Sheeran y otra canción que Omen no conocía de nada. Fue muy entretenido al principio, pero Omen empezó a aburrirse a la segunda canción.

Cuando Alice extendió los brazos e hizo una reverencia teatral, Omen aplaudió.

—¡Muy bien! ¡Lo has hecho genial!

—Gracias —respondió Alice satisfecha—. ¿Qué es lo que más te ha gustado?

—El principio, lo del medio y también lo del final. Ha estado muy bien, muy…

—¿Jugamos al escondite?

—Hum… Vale.

—¿Sabes cómo se juega?

—Sí.

—¿Jugabas al escondite de pequeño?

—Sí, con mi hermano.

—¿Es mayor que tú o más pequeño?

—Mayor, pero solo unos minutos.

—Mi hermana tiene dieciocho años más que yo.

—Lo sé.

—¿Es tu novia?

Omen soltó una carcajada.

—Qué va. Es mucho mayor que yo.

—¿Tienes novia?

Se quedó pensativo.

—Creo que sí.

—¿Cómo se llama?

—Aurnia. Es muy simpática.

—¿Estás enamorado?

—Ja. Aún no.

—¿Cómo puede ser tu novia, si no estás enamorado de ella?

—Porque me gusta mucho.

Alice asintió, satisfecha con la respuesta.

—¿Jugamos entonces al escondite? —preguntó Omen.

—No —contestó ella.

—Ah. ¿Quieres que te lea un cuento o algo?

—Sí.

—¿Tienes algún libro?

—La mitad están en mi dormitorio. Son los cuentos para dormir. La otra mitad está en esa estantería. Son para contar por el día.

—Muy bien —Omen se agachó y empezó a mirar libros—. ¿Qué te apetece? ¿La increíble sombra de Jack? ¿Pequeñas Leyendas? ¿Alice?

La niña no respondió. Estaba pegada a la ventana de atrás.

—¿Alice? ¿Qué pasa?

Ella señaló algo con el dedo.

—Había un hombre ahí.

Omen se levantó.

—¿Dónde?

—Fuera. Estaba mirándonos.

La uña helada del miedo arañó la espalda de Omen de arriba abajo. Se acercó a la ventana.

—¿Cómo era?

—Viejo.

—¿Lo habías visto antes?

Al ver que la niña asentía, Omen se relajó.

—Ah, vale. ¿Dónde?

Alice señaló.

—En esa otra ventana.

El miedo volvió a apoderarse de él.

Seguramente no fuera nada. Debía de ser un vecino. O alguien a quien se le había pinchado una rueda, necesitaba llamar a la grúa y no se había enterado aún de la existencia de los teléfonos móviles, gracias a los cuales no tendría necesidad de salir de su coche.

Omen salió al pasillo y se quedó petrificado.

La puerta de entrada estaba abierta.

—Alice —murmuró retrocediendo—. Alice, ven aquí.

Cuando la niña se acercó, le agarró la mano y se agachó.

—Vamos a jugar a no hacer ruido —susurró—. ¿Eres capaz de estar callada?

Ella asintió muy seria y Omen sacó su móvil.

—Menuda sorpresa —dijo alguien a su espalda.

Omen se dio la vuelta y contuvo un grito a duras penas. Cadaverus Gant estaba de pie en las escaleras.

—Esperaba encontrar a sus padres —dijo—: un par de débiles mortales con mentes manipulables a los que obligaría a entregar mi mensaje. Y, sin embargo, me encuentro al menor de los hermanos Darkly.

descargar

Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.