Me moriré en ParÃs by Cesar Vallejo
autor:Cesar Vallejo
La lengua: spa
Format: epub
editor: 2019
publicado: 2019-10-03T11:20:42+00:00
LOS ARTISTAS ANTE LA POLÃTICA
El artista es, inevitablemente, un sujeto polÃtico. Su neutralidad, su carencia de sensibilidad polÃtica probarÃa chatura espiritual, mediocridad humana, inferioridad estética. ¿Pero en qué esfera deberá actuar polÃticamente el artista? Su campo de acción polÃtica es múltiple: puede votar, adherirse o protestar, como cualquier ciudadano; capitanear un grupo de voluntades cÃvicas, como cualquier estadista de barrio; dirigir un movimiento doctrinario nacional, continental, racial o universal, a lo Rolland. De todas estas maneras puede, sin duda, militar en polÃtica el artista; pero ninguna de ellas responde a los poderes de creación polÃtica, peculiares a su naturaleza y personalidad propia. La sensibilidad polÃtica del artista se produce, de preferencia y en su máxima autenticidad, creando inquietudes y nebulosas polÃticas, más vastas que cualquier catecismo o colección de ideas expresas y, por lo mismo, limitadas, de un momento polÃtico cualquiera, y más puras que cualquier cuestionario de preocupaciones o ideales periódicos de polÃtica nacionalista o universalista. El artista no ha de reducirse tampoco a orientar un voto electoral de las multitudes o a reforzar una revolución económica, sino que debe, ante todo, suscitar una nueva sensibilidad polÃtica en el hombre, una nueva materia prima polÃtica en la naturaleza humana. Su acción no es didáctica, transmisora o enseñatriz de emociones o ideas cÃvicas, ya cuajadas en el aire. Ello consiste, sobre todo, en remover, de modo oscuro, subconsciente y casi animal, la anatomÃa polÃtica del hombre, despertando en él la aptitud de engendrar y aflorar a su piel nuevas inquietudes y emociones cÃvicas. El artista no se circunscribe a cultivar nuevas vegetaciones en el terreno polÃtico, ni a modificar geológicamente ese terreno, sino que debe transformarlo quÃmica y naturalmente. Asà lo hicieron los artistas anteriores a la Revolución rusa y creadores de ella. La cosecha de semejante creación polÃtica, efectuada por los artistas verdaderos, se ve y se palpa sólo después de siglos, y no al dÃa siguiente, como acontece en la acción superficial del seudo-artista.
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