Intenta olvidarme by Mario Quintana

Intenta olvidarme by Mario Quintana

autor:Mario Quintana [Quintana, Mario]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Poesía
ISBN: 9788432150586
publicado: 2019-02-28T11:20:06+00:00


Há os que fazem materializações…

Grande coisa! Eu faço desmaterializações…

Subjetivações de objetos.

Inclusive sorrisos,

Como aquele que tu me deste um día com o mais puro azul de teus olhos

E nunca mais nos vimos. (Na verdade, a gente nunca mais se ve…) No entanto,

Há muito que ele faz parte de certos estados do céu.

De certos instantes de serena, inexplicável alegria,

Assim como um vôo sozinho põe um gesto de adeus na paisagem,

Como uma curva de caminho.

Anónima,

Torna-se às vezes a maior recordação de toda uma volta ao mundo!

Operación alma

Están los que materializan,

y tienen su importancia. Pero yo desmaterializo.

Subjetivizo objetos,

incluidas sonrisas,

como aquélla que tú me diste un día con el más puro azul

de tus ojos, y nunca más nos vimos. (No, ya no nos vimos nunca más…).

Entretanto

hace mucho que tu sonrisa forma parte de ciertos estados de cielo

y de ciertos momentos de serena, inexplicable alegría,

como un vuelo de un pájaro pone un gesto de adiós en el paisaje,

como una curva del camino,

anómina,

se vuelve a veces el mejor recuerdo de una vuelta al mundo.

Poema da gare de astapovo

O velho Leon Tolstoi fugiu de casa aos oitenta anos

E foi morrer na gare de Astapovo!

Com certeza sentou-se a um velho banco,

Um desses velhos bancos lustrosos pelo uso

Que existem em todas as estaçõezinhas pobres do mundo;

Contra uma parede nua…

Sentou-se… e sorriu amargamente

Pensando que

Em toda a sua vida

Apenas restava de seu a Glória,

Esse irrisório chocalho cheio de guizos e fitinhas

Coloridas

Nas mãos esclerosadas de um caduco!

E então a Morte,

Ao vê-lo tão sozinho àquela hora

Na estação deserta,

Julgou que ele estivesse ali à sua espera,

Quando apenas sentara para descansar um pouco!

A Morte chegou na sua antiga locomotiva

(Ela sempre chega pontualmente na hora incerta…)

Mas talvez não pensou em nada disso, o grande Velho,

E quem sabe se até não morreu feliz: ele fugiu…

Ele fugiu de casa…

Ele fugiu de casa aos oitenta anos de idade…

Nao são todos os que realizam os velhos sonhos da infãncia!

La estación de astapovo

El viejo León Tolstói huyó de casa a los ochenta años

y fue a morir en la estación de Astapovo.

Según se sabe, se sentó en un viejo banco,

de esos brillantes por el uso,

que uno se encuentra en todas las estaciones pobres

del mundo, frente a una pared desnuda…

Se sentó y sonrió amargamente

pensando que en toda su vida

apenas quedaba de su Gloria

ese irrisorio sonajero lleno de cascabeles y cintas

de colores

en la mano esclerótica de un viejo.

La Muerte, entonces,

al verlo solitario a aquella hora

en la estación desierta,

pensó que estaba allí esperándola,

aunque se había sentado por descansar, apenas.

Llegó la Muerte en su locomotora antigua

(siempre puntual en la hora incierta…)

Pero quizá el gran Hombre no pensó en nada de esto

y quién sabe si hasta murió feliz: él se fugó…

Él se fugó de casa…

Él se fugó de casa a los ochenta años de edad…

¡No todos realizamos los sueños de la infancia!

Trecho de diário

Hoje me acordei pensando em uma pedra numa rua de Calcutá.

Numa determinada pedra em certa rua de Calcutá.

Solta. Sozinha. Quem repara nela?

Só eu, que nunca fuí lá,

Só eu, deste lado do mundo, te mando agora esse pensamento…

Minha pedra de Calcutá!

Fragmento de diario

Hoy desperté pensando en una piedra en una calle de Calcuta.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.