El diario azul de Carlota by Gemma Lienas

autor:Gemma Lienas [Lienas, Gemma]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Juvenil
editor: ePubLibre
publicado: 2005-12-31T16:00:00+00:00

22 de octubre

¡Tachán! Mamá nos dice que ha invitado a cenar a su amigo…

—Tu amigo el especial, ¿no? —pregunto con toda la mala intención.

Mamá levanta un dedo supuestamente amenazador:

—Carlota, espero que ni se te ocurra soltar alguna tontería de las tuyas.

Le guiño un ojo a Marcos y digo:

—No te preocupes, mamá. No haré el tonto. Me limitaré a preguntar si sus intenciones hacia ti son serias.

—Yo le preguntaré si se ha propuesto llevarte al altar.

—¡Carlota! ¡Marcos! —grita mi madre con falso terror.

—¿No quieres? —le pregunto con mucha inocencia.

—Mira que lo pone complicado… —dice Marcos.

—No quiero que hagáis ningún comentario impertinente, ni siquiera en broma. ¿De acuerdo?

Me parece que mamá no las tiene todas consigo. Intento desviar su atención.

—¿Y qué tenemos para cenar?

Lo pregunto pensando que conocer al amigo especial de mamá es un buen motivo para cenar algo poco habitual. Poco habitual no porque a mamá no le guste cocinar —que le gusta, ¡y mucho!—, sino porque nunca dispone del tiempo suficiente para preparar platos elaborados.

En efecto. He acertado. De primero, chipironcitos con garbanzos. De segundo, lubina al horno. De postre, una papillota de frutas. ¡Mmm!

Se nota que mamá quiere causar buena impresión.

—¡Serás boba! —me dice tronchándose de risa cuando se lo comento.

—Ahora en serio, mamá. Fernando ¿es tu novio, tu amante, o qué es?

—Es un amigo especial —contesta ella en tono de burla.

—¿Piensas traerlo a vivir con nosotros?

Mamá me mira perpleja.

—Carlota, de momento no tengo intención de prescindir de las relaciones íntimas con un hombre, ni de oficializar mi relación. Así que todo continuará como hasta ahora. Si algún día cambio de idea, os lo diré con tiempo.

Mientras Marcos y mamá acaban de preparar la cena, yo me invento un informe sobre los celos, que ya hace días que quería escribir.

Informe 4

Los celos no son amor, sino una enfermedad.

Los celos aparecen por culpa de la idea que a menudo tenemos en el cerebro sobre cómo debe ser una relación amorosa. O sea, una vez más, ¡el cerebro nos la juega!

Primera idea equivocada: muchas personas creen que la persona a quien aman les pertenece y que tienen todos los derechos sobre su vida. Piensan: «Si me quiere, no puede tener una relación íntima, sea emocional o sexual, con otra».

Segunda idea equivocada: muchas personas creen que los celos son una señal de amor. Y no es verdad: los celos sólo indican que una persona quiere dominar a la otra. Piensan: «Mi pareja no puede dejarme nunca porque, si lo hace, no lo soportaré».

Cuanta menos confianza en ella misma tenga una persona, cuanto más desigual sea una relación, más probabilidad hay de que aparezcan los celos.

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