El acosador nocturno by Chris Carter

El acosador nocturno by Chris Carter

autor:Chris Carter [Carter, Chris]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Intriga
editor: ePubLibre
publicado: 2011-01-01T00:00:00+00:00


Cincuenta y ocho

Hunter había pasado el resto de la noche en el ordenador averiguando quién era realmente Whitney Myers.

Por la mañana, luego de una taza de café fuerte, regresó a Culver City y al estudio de Kelly Jensen. La luz roja parpadeante que había visto la noche anterior desde la ventana era una cámara inalámbrica de seguridad, escondida en un hueco en la pared. La cámara apuntaba derecho al aparcamiento. No había ordenadores en el estudio de Kelly, por lo que la cámara no podía haber sido de ella.

A las 6:00 a. m. solo una de las tiendas que compartía el aparcamiento para coches estaba abierta −el almacén del señor Wang−. Hunter estaba de suerte; la cámara inalámbrica le pertenecía al anciano chino con aspecto de pájaro.

El rostro arrugado del señor Wang y sus ojos observadores apenas insinuaban cuánto había vivido, lo que había visto y el tremendo conocimiento que había acumulado a lo largo de los años.

Le dijo a Hunter que le había pedido a su hijo, Fang Li, que instalara la cámara en la parte trasera luego de que le robaran muchas veces de la vieja camioneta Ford.

Hunter le preguntó hasta cuánto tiempo atrás llegaban las grabaciones.

—Un año −contestó el señor Wang con una sonrisa amplia que parecía no borrarse nunca.

La cara de Hunter se encendió de sorpresa:

—¿Tiene grabaciones hasta hace un año atrás?

—Sí. Cada minuto. −Su voz era como un susurro, pero las palabras salían rápido, como si se estuviera por quedar sin tiempo para decir lo que quería decir. Su pronunciación era perfecta, lo cual indicaba que estaba en Estados Unidos desde hacía muchos años, pero las frases salían en staccato−. Fang Li muy inteligente. Bueno con ordenadores. Hizo programa que guarda archivos. Doce meses, archivos se borran automáticos. No necesito hacer nada.

Hunter movió la cabeza de arriba abajo:

—Astuto. ¿Puedo verlos?

Era tan delgada la línea de los ojos del señor Wang que quedó abierta, que Hunter pensó que los había cerrado:

—¿Quiere ver en almacenamiento de ordenador?

Un veloz asentimiento:

—Sí. Me gustaría ver el archivo de hace algunas semanas.

El señor Wang hizo una reverencia y su sonrisa se hizo aún más amplia:

—Vale, no problema, pero yo no bueno. Necesita hablar con Fang Li. Él no aquí. Yo llamar. −El señor Wang cogió el teléfono que estaba detrás del mostrador. Habló en mandarín. La conversación no duró más de unos segundos−. Fang Li viniendo −dijo, colgando el teléfono−. Estar aquí muy pronto. No vivir lejos. −Miró su reloj−. No fue a trabajo todavía. Muy temprano.

Hunter le preguntó al señor Wang acerca de Kelly Jensen. Le dijo que ella iba a la tienda casi todos los días cuando andaba por allí, pero a veces desaparecía durante semanas. Kelly le caía muy bien. Dijo que era muy amable, que estaba siempre contenta y que era muy hermosa.

—En mi país, todo el pueblo pediría a ella para casarse.

Hunter sonrió y recorrió la tienda con la vista mientras esperaba. Compró una taza de café para microondas y un paquete de charqui sabor teriyaki. Unos minutos después llegó Fang Li.



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